viernes, 2 de mayo de 2014

Reflexiones periodísticas: los Súper-periodistas





Hace unos días llegó un señor al periódico donde trabajo para denunciar varios hechos de acoso por parte de policías en su contra. El hombre en sí se me hizo un tanto curioso, inteligente pero al grado de parecer un tanto cucú. Lo que fue una denuncia se convirtió en una charla, en la cual me contó todo lo que le ha pasado a lo largo de varios años, y yo intenté darle consejos sobre qué medidas tomar.
Ya casi al final, el señor me hizo una reflexión que sin saberlo se pegó en mi lado geek: "¿usted sabe lo importante que es su trabajo como periodista? ¿No? Piénselo así, Superman, ¿qué es? Spiderman ¿qué es? Los dos son reporteros, porque su papel tanto en el trabajo como superhéroes es ayudar a la gente".
Después de un par de semanas y pensarlo mucho, tiene mucho sentido. Los superhéroes lo que buscan es ayudar a la gente, acabar con las injusticias, hacer del mundo un mejor lugar; tienen los recursos físicos -sus superpoderes-, intelectuales -su capacidad de investigar- para dar con los malos y luchar contra ellos.
Aunque suene idealista ese es el trabajo del reportero, su objetivo es poner el dedo en la llaga, abrir una ventana para que la gente pueda ver a los ricos y poderosos y así cerrar las posibilidades de que se haga mal. El periodista por medio de sus superpoderes que en algunos casos es la empatía para hacer que la gente se abra y te cuente sus problemas, su facilidad para buscar en documentos y en internet información, o hasta esa destreza física para escabullirse y poder entrevistar al funcionario que en fechas recientes la cagó.
Pero claro, como diría el buen Tío Ben Parker "con un poder viene una grande responsabilidad". Hay quienes de desvían del camino del bien, el poder que saben que tienen los corrompe y se convierten en los ayudantes de los villanos o incluso en los propios árchienemigos de la prensa libre y de la sociedad.
En mi opinión un periodista debe tomar un poco de cada uno de los grandes personajes de los cómics: la inteligencia y audacia mental de Batman para poder investigar los temas; el lado humano y sensible de Spiderman; la fuerza de Superman para poder luchar contra lo que se venga; un poco de piel dura de Wolverine para soportar los tragos amargos de la realidad; el lazo de la verdad de la Mujer Maravilla. Ya si pudiéramos respirar bajo el agua como Aquaman ya estaría muy cabron.
De mi parte, no se ve como una posibilidad quitarme la capa y cambiar de profesión. Siempre estaré del lado de la Liga de la Justicia, una joven en vías de preparación en la escuela del profesor Xavier, buscando la forma de controlar sus poderes y ayudar en lo que se pueda.